VolverLa diferencia fundamental entre donaciones y herencias es que, en el primer caso, el donante sigue con vida. Así, el resultado de la donación es siempre positivo, al contrario que en las herencias, que pueden llegar a ser en algunos casos negativas debido a las deudas del fallecido. Sin embargo, ambas tienen en común que se debe realizar el pago del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones.
Dicho impuesto se gestiona de manera automática y se ha de liquidar ante los órganos competentes de cada comunidad autónoma. Además, cada comunidad puede favorecer diferentes tipos de donación entre familiares.
Pese a esto, lo más habitual es declarar el dinero recibido a través de donación, aunque el resultado a pagar sea cero.
Se establecen diferencias en cuanto a la cantidad de dinero que ha sido donado. Si se trata de donaciones inferiores a 3.000 euros, es habitual no tener que pagar el impuesto en la mayoría de casos.
En las instrucciones para rellenar el modelo 651, de la adquisición de bienes por donación, la AEAT avisa que los españoles están “obligados a presentar declaración o autoliquidación por este impuesto por los bienes y derechos que adquieran por donación o cualquier otro negocio jurídico a título gratuito e inter vivos”. La presentación de este documento se debe realizaren un plazo máximo de 30 días hábiles desde que se hace efectivo el contrato de donación.
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