VolverEmitir facturas por servicios profesionales utilizando una entidad interpuesta puede levantar dudas por parte de las autoridades fiscales. Hacienda tiende a considerar sospechosa la creación de una Sociedad Limitada Unipersonal (SLU) cuando no existe una verdadera estructura empresarial detrás, lo que podría dar lugar a acusaciones de evasión de impuestos. Para evitar posibles sanciones de Hacienda, es fundamental asegurarse de contar con una estructura empresarial legítima, acciones corporativas y la capacidad de realizar la actividad económica con la participación de más de un profesional.
Una entidad interpuesta, en términos fiscales y legales, representa una entidad empresarial que se establece aparentando llevar a cabo actividades económicas legítimas, pero en realidad opera como una intermediaria o pantalla. Esta pantalla oculta a una persona física que ejerce como el único administrador. En otras palabras, se trata de una compañía empleada para reducir la carga tributaria, dado que las empresas están sujetas al Impuesto de Sociedades con una tasa fija del 25%, mientras que los autónomos tributan según su escala en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Estas entidades interpuestas a menudo involucran a una persona que las utiliza para facturar sus servicios profesionales. Esta táctica puede emplearse con diversas finalidades, como evadir impuestos, ocultar activos, evitar responsabilidades legales o llevar a cabo transacciones financieras poco transparentes. No todas las entidades interpuestas son ilegales, pero su legalidad depende en gran medida de su propósito y de si cumplen con las regulaciones fiscales y comerciales.
Cuando la empresa tiene los recursos necesarios y el socio posee al menos el 25% del capital social, Hacienda revisará si la compensación del socio cumple con las tasas de mercado, requiriendo que esta represente al menos el 75% de los beneficios antes de impuestos.
Consejos para evitar sanciones fiscales al establecer una Sociedad Limitada Unipersonal
Prevenir sanciones fiscales de Hacienda al establecer una entidad interpuesta es crucial para mantener una situación fiscal legal y sin problemas. Aquí tienes algunos consejos para lograrlo:
- Legalidad y transparencia: Asegúrate de que tu entidad interpuesta cumpla completamente con las regulaciones fiscales y comerciales vigentes en tu país.
- Propósito legítimo: La entidad interpuesta debe tener un propósito comercial legítimo y sustancial, como la gestión de una actividad empresarial real.
- Estructura empresarial sólida: La entidad interpuesta debe contar con una estructura empresarial real, incluyendo instalaciones, empleados, equipos y recursos necesarios para llevar a cabo operaciones comerciales.
- Remuneración adecuada: Si eres el socio principal, asegúrate de que la compensación que recibes por tus servicios se ajuste a las tarifas de mercado, evitando la subvaloración o sobrevaloración con fines fiscales.
- Registro preciso: Lleva un registro financiero completo y preciso de todas las transacciones relacionadas con la entidad interpuesta, incluyendo ingresos, gastos, facturas y documentación relevante.
- Cumplimiento fiscal: Asegúrate de cumplir con todas las obligaciones fiscales, como la presentación de declaraciones de impuestos y el pago puntual de impuestos corporativos y personales.
- Asesoramiento fiscal: Considera la posibilidad de consultar con un asesor fiscal o contable que tenga experiencia en la legislación fiscal local para tomar decisiones informadas y cumplir con las regulaciones fiscales.
- Evitar vínculos sospechosos: Si tienes conexiones financieras o familiares con la entidad interpuesta, asegúrate de que sean legítimas y no generen sospechas de evasión fiscal.
- Auditorías internas: Realiza auditorías internas periódicas para garantizar que todas las transacciones y operaciones se ajusten a las regulaciones y estándares del mercado.
- Educación continua: Mantente al tanto de las leyes fiscales y los cambios normativos que puedan afectar a la entidad interpuesta. La educación continua te ayudará a tomar decisiones más informadas y evitar multas sorpresa.
Cuando Hacienda detecta que una entidad interpuesta es ilegal o se utiliza para evadir impuestos, las consecuencias son importantes.
Si una entidad interpuesta carece de la infraestructura necesaria para llevar a cabo su actividad profesional, Hacienda la considera una simulación, regulada por el artículo 16 de la Ley General Tributaria. En este caso, Hacienda regulariza la situación del contribuyente, que debe tributar por la totalidad de los beneficios en su declaración de Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). La entidad interpuesta se ignora por completo, al considerarse un mero artificio para evadir impuestos.
Estas medidas son tomadas en serio por Hacienda para prevenir el abuso de entidades interpuestas y garantizar el cumplimiento fiscal. Por lo tanto, es fundamental que quienes usen estas estructuras aseguren que sean legítimas y cumplan con las regulaciones fiscales para evitar consecuencias negativas.
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